Deborah Oliveros Braniff estudió la licenciatura en la Facultad de Ciencias de la UNAM y desde muy joven dio muestras de talento para la investigación en matemáticas. Su tesis doctoral (UNAM) versa sobre una conjetura de Stanislaw Ulam, sobre el equilibro en la flotación de los cuerpos. En dimensión tres la conjetura está aún abierta y la tesis de Deborah, un bello tratado en donde se intercalan de manera original la geometría convexa y los sistemas dinámicos, sentó las bases teóricas para que un año más tarde Wagner encontrará una solución en dimensión 2. A partir de entonces, la investigación de la Dra. Oliveros tiene como centro la geometría discreta en donde ha alcanzado notoriedad y grandes éxitos. Su currículum es simplemente abrumador e incluye la publicación por Birkhäuser, el año pasado, del libro “Bodies of Constant Width” que será con seguridad una fuente de inspiración para jóvenes estudiantes e investigadores de todo el mundo.

La lista de sus publicaciones es impresionante tanto por la cantidad como por la calidad de las revistas. Es de llamar la atención la versatilidad de su investigación así también como la calidad de sus coautores siendo estos con mucha frecuencia líderes internacionales en los respectivos temas a tratar. Su talento la ha llevado a hacer estancias académicas en muchas importantes instituciones del mundo así como a ser invitada como ponente en los más importantes congresos internacionales de geometría discreta. Sus relaciones académicas le han permitido firmar convenios de colaboración con varias universidades y organizar varios congresos internacionales (BIRS).

Hace doce años tuvo la audacia de iniciar la aventura de acompañar al grupo de matemáticos de la UNAM que llegaron a Querétaro. Es pues fundadora de la Unidad del Instituto de Matemáticas, Campus-Juriquilla y su directora durante el bienio 2015-2016. La Escuela Nacional de Estudios Superiores en Juriquilla inagurará pronto una licenciatura en matemáticas cuya elaboración de los planes de estudio fueron coordinados por la Dra. Oliveros. Por si fuera poco, Deborah es una persona sencilla, amable y de trato excepcional.

( Luis Montejano Peimbert )